¿Qué debo buscar?

El Chagas tiene dos fases: una fase aguda y una fase crónica.

La fase aguda dura unas semanas o meses después de la infección. Las personas a menudo no se dan cuenta de que han sido infectadas, porque pueden no tener síntomas — o síntomas leves como fiebre, fatiga, dolores en el cuerpo, dolor de cabeza, sarpullido, pérdida de apetito, diarrea y vómitos — que pueden confundirse fácilmente con otra cosa.

Un examen físico puede revelar un agrandamiento del hígado o del bazo, inflamación de las glándulas e hinchazón local (un chagoma) donde el parásito entró en el cuerpo. La marca más reconocible de la enfermedad de Chagas aguda se llama signo Romaña, que incluye la hinchazón de los párpados en el lado de la cara cerca de la herida de mordida o donde se depositaron las heces de insecto. Incluso si los síntomas se desarrollan durante la fase aguda, generalmente se desvanecen por sí solos, en pocas semanas o meses. La infección puede ser más severa en niños pequeños y personas con sistemas inmunitarios debilitados.

Durante la fase crónica, la infección puede permanecer en silencio durante décadas o incluso para la vida. Sin embargo, algunas personas desarrollan:

• Complicaciones cardíacas, que pueden incluir un corazón agrandado, insuficiencia cardíaca, ritmo cardíaco o rítmico alterado, y paro cardíaco (muerte súbita)
• Complicaciones intestinales, que pueden incluir un esófago agrandado o un colon y pueden llevar a dificultades con el comer o con pasar el taburete

¿Qué debo hacer?

Los fármacos antiparasitarios se utilizan tradicionalmente para tratar las infecciones agudas y congénitas, las infecciones crónicas en niños de 18 años o más, y la reactivación de infecciones latentes en personas con sistemas inmunitarios débiles. El tratamiento antiparásito es el más eficaz temprano en el curso de la infección.

Muchos médicos en los Estados Unidos no están familiarizados con el Chagas o piensan que se limita a los inmigrantes de Latinoamérica. Sin embargo, los besos de bugs y Chagas se encuentran en Texas y en todo el sur de los Estados Unidos. Las personas que viajan a América Latina y Sudamérica están en riesgo si visitan zonas rurales o zonas con insectos triatominos endémicos. Si usted piensa que puede tener Chagas o haber sido mordido por un insecto que besa, visite a su proveedor de atención médica. El Chagas puede ser diagnosticado con análisis de sangre.

Más información en: https://www.cdc.gov/parasites/Chagas/index.html.

Prevención

Si está viajando a zonas donde el Chagas es endémico:

• Utilizar mosquiteros tratados con insecticidas de larga duración
• Usar ropa protectora
• Aplicar repelente de insectos a la piel expuesta
• Tenga en cuenta que el Chagas también puede transmitirse a través de transfusiones de sangre y alimentos o bebidas contaminadas con heces de insectos infectadas

En los Estados Unidos:

• Mantenga limpias las áreas de los patios y las perreras para eliminar el hábitat de los insectos, eliminar las pilas de arbustos, las pilas de roca y la acumulación excesiva de hojarasca
• Controle los roedores para quitar una fuente de alimento potencial para los bichos que besan
• Apague las luces al aire libre en la noche para que los bichos no se sienten atraídos por la casa y el patio
• Identifique y selle los puntos de entrada de los bichos en el hogar
• Considere el uso de insecticidas duraderos
• Guarde los alimentos para mascotas y los tazones de agua dentro para evitar la contaminación con heces de los insectos infectados
• Mantenga las casas para perros y gallineros limpias, llene las grietas donde los insectos pueden esconderse, y considerar el uso de pesticidas duraderos en y alrededor de estas estructuras